En la mayoría de los casos, son cosas que se pueden solucionar en unos minutos, con un ligero cambio de planes o con una mínima pérdida de tiempo; en otros casos, sin embargo, los eventos requieren un poco más de atención.
Nos gustaría minimizar al máximo estas situaciones y lo único que podemos hacer es prevenirlas.
Hoy queremos hablaros de un objeto que esperamos sinceramente que no necesitéis nunca, pero que es mejor tener siempre a mano cuando nos vamos unos días fuera de casa a una aventura al aire libre: el botiquín de primeros auxilios.
¿Cómo elegirlo? Buena pregunta.
Pero hay muchas respuestas.
Lo que te aconsejamos que hagas es pensar de antemano en el tipo de vacaciones que estás a punto de hacer: ¿una semana de camping de mochilero? Recomendamos un kit mínimo y, sobre todo, ligero que pueda caber fácilmente en un espacio pequeño.
Al estar dentro de una estructura gestionada, es muy probable que también haya un punto de primeros auxilios y para ello no necesitarás llevar contigo quién sabe qué.
Otra cosa si en cambio planeas unos días de acampada libre: en este caso, aunque el espacio disponible para ti sigue siendo limitado, te sugerimos que pienses en un kit más completo, para cubrir una mayor variedad de imprevistos.
Al hacer una búsqueda rápida en línea, encontrará muchos kits para elegir.
La buena noticia son los precios bajísimos: partiendo de una dotación mínima hasta llegar a un auténtico botiquín, el rango de precios oscila entre los 10 y los 25€.
¿Qué hay en un buen kit? En nuestra experiencia, un desinfectante para pequeñas heridas o descamaciones, tiritas, gasas esterilizadas, unas tijeras pequeñas y un poco de esparadrapo son imprescindibles.
Este pequeño equipo debería ser suficiente para solucionar el 90% de los pequeños accidentes que pueden ocurrir durante unos días de acampada.
Si por el contrario quieres protegerte de cualquier eventualidad y tienes un vehículo de cuatro ruedas (por ejemplo una camper), puedes optar fácilmente por un botiquín un poco más voluminoso pero sin duda más completo: puedes encontrar algunos que contiene más de cincuenta piezas entre pinzas, algodón, torniquete, hielo instantáneo, termómetro electrónico y mucho más. Obviamente otra variable a tener en cuenta es la presencia o ausencia de niños: si incluso los más pequeños vienen contigo, es bueno estar listo para enfrentar algunos eventos inesperados más.
¿Tiene alguna sugerencia para dar basada en sus experiencias directas? ¡Escríbenos!
