Son años difíciles para nuestro planeta: el calentamiento global se ha convertido en algo más que una simple amenaza y la contaminación en una triste realidad.
Por eso debemos esforzarnos cada vez más para que nuestra presencia en este planeta sea lo más ecosostenible posible.
Todos sabemos que acampar es una de las mejores formas de pasar unas vacaciones en contacto con la naturaleza, respetando al máximo el entorno que nos rodea y utilizando lo mínimo posible las pequeñas ayudas que el progreso ha puesto a nuestra disposición.
Por muy cuidadosos que seamos durante nuestra estancia en el camping, aún corremos el riesgo de cometer errores más o menos graves que pueden dañar involuntariamente el medio ambiente.
Tratemos de entender juntos lo que estamos haciendo mal.
¿Cómo hacer con nuestra hoguera? Comencemos con el fuego: ya hemos especificado muchas veces cuán esencial es respetar las leyes sobre el encendido de llamas abiertas para evitar daños a nosotros y a la vegetación que nos rodea.
Si todo está permitido en el lugar donde vamos a acampar, primero hagámonos una pregunta: ¿podríamos tener una alternativa a nuestra fogata? La respuesta es sí.
Al encenderlo, aunque con cuidado, se deja un rastro que la naturaleza tarda mucho en borrar: cenizas, madera quemada, restos de comida, piedras ennegrecidas y mucho más son nuestro patrimonio para los animales y el medio ambiente.
En los últimos años se han desarrollado diferentes soluciones que nos permiten tener nuestro fuego de forma ecosostenible: hay fogatas portátiles que se pueden llevar cómodamente en una mochila y que duran muchas horas después de ser encendidas; el material combustible también es totalmente reciclado y ecológico.
Una vez que se extingue la llama, el recipiente puede cerrarse y transportarse para su eliminación.
Por lo tanto, nuestro consejo es evitar encender hogueras en el suelo.
Mejor no molestar a los animales Acampar cerca de un bosque puede permitirnos avistar una gran cantidad de especies de animales salvajes.
Ver un cervatillo en su hábitat natural es un recuerdo que llevaremos con nosotros toda la vida y no necesariamente necesitamos una foto para tenerlo en cuenta: evitamos los flashes y los recechos para conseguir la mejor toma, los animales podrían asustarse .
Con más razón también tratamos de mantener la distancia de seguridad, no hacer demasiado ruido y, sobre todo, no darle de comer: no sabemos si la comida que le estamos dejando con las mejores intenciones puede o no ser perjudicial para él.
Después de todo, los animales salvajes siempre han estado en los bosques y siempre han sobrevivido sin ayuda externa.
No dejes residuos Ya hemos hablado de acampar en la playa (artículo ENLACE) y en realidad es uno de los aspectos principales de acampar de forma ecológica: ¿qué hacer con los residuos? La respuesta es realmente muy simple, deben ser recolectados y transportados con nosotros y luego eliminados en la recolección separada de residuos.
Dejar basura es malo para el medio ambiente y para los animales y no hay otra solución que llevársela; incluso los que consideramos “residuos húmedos”, por muy biodegradables que sean, no deben dejarse en ecosistemas a los que no pertenecen.
Lo que sí podemos hacer es evitar producir un exceso de residuos reduciendo al mínimo nuestros equipos y utilizando productos que no dejen huellas en el medio ambiente (papel higiénico totalmente biodegradable, jabones ecológicos, etc.).
Estos son solo algunos de los muchos consejos que nos pueden ayudar a tener un enfoque responsable de nuestra vida como campistas.
¡Si tienes otros, escríbenos!Foto: Christopher Cook